Después de tomar la decisión valiente de pedir el alta voluntaria en un proceso de rehabilitación, la esperanza crece y la sensación de éxito puede abrumarte. Sin embargo, ¿qué ocurre si te encuentras en una situación en la que recaes después de haber tomado esta importante determinación? Afrontando la recaída con valentía y determinación.
¿Por qué pedir el alta voluntaria?
Cuando decides solicitar el alta voluntaria en un programa de recuperación, es un paso que implica una gran cantidad de pensamiento y coraje. Puede ser debido a diversas razones, como sentirte listo para enfrentar el mundo sin necesidad de ayuda profesional constante, o quizás debido a compromisos personales o laborales que requieren tu atención inmediata. Sea cual sea la razón, el alta voluntaria marca el comienzo de un nuevo capítulo en tu vida.